martes, 8 de diciembre de 2009

San Antonio de Areco, Ferrocarril Mitre





"El pueblo dormía aún a puños cerrados y dirigí mi petiso al tranco, singularmente sonoro, hacia la cochera de Torres, donde pediría me entregasen el otro petiso, que allí hacía guardar Festal chico.

Un gallo cantó. Alboreaba imperceptiblemente. Como la cochería comenzaba a despertar temprano, a fin de prepararse para el tren de la madrugada, encontré el portón abierto y a Remigio, un muchachón de mis amigos, entre la caballada."

Ricardo Güiraldes: Don Segundo Sombra.

Fin del mito.